¿Para qué sirve?
La artroscopia tiene muy pocas indicaciones durante la osteoartritis. Sin embargo, se puede proponer en la osteoartritis de rodilla cuando se sospecha la presencia de un trozo de cartílago o menisco móvil e inestable en esta articulación.
¿Cómo funciona?
La intervención, realizada en un bloque operatorio, requiere una hospitalización corta (entre 24 y 48 h). Este gesto se practica con anestesia local, epidural o general en el bloque operatorio. Consiste en introducir una pequeña cámara dentro de la articulación enferma para evaluar las lesiones provocadas por la osteoartritis.
También permite practicar una “limpieza” articular para eliminar de la articulación los desechos cartilaginosos o meniscales, bien practicando un lavado articular o directamente con una pinza.
El médico que la realice puede, en efecto, gracias
¿Qué precauciones tomar?
Tras el tratamiento se aconseja un período de reposo variable de la articulación tratada.
Las complicaciones que pueden darse son las vinculadas a cualquier intervención quirúrgica (complicaciones de anestesia, riesgos de flebitis y embolia pulmonar), así como las relacionadas con el gesto quirúrgico en una articulación (infecciones y algodistrofia).